En un contexto en el que la inflación hace mella en la renta de los hogares, la patronal de concesionarios Faconauto se ha propuesto dar un impulso a la venta de vehículos de segunda mano como vía para hacer crecer el negocio. La demanda ya cuadruplica la de turismos nuevos, pues las cifras indican que hasta octubre se vendieron en Galicia 87.896 coches usados frente a 21.151 a estrenar. El volumen pesa mucho, si bien es cierto que las matriculaciones de estos últimos crecen más, a un ritmo del 10% anual frente al 1% del mercado de ocasión, que ha visto dispararse los precios tras el covid al eclosionar la demanda por los parones en las fábricas debido a la falta de piezas.
"Los vehículos de ocasión son una palanca que va a propiciar que vayamos más rápido hacia la movilidad sostenible", explicó este martes Marta Blázquez, la presidenta de Faconauto, en un foro sectorial en la sede de la CEG en Santiago. Es por ello que la patronal reivindica que las ayudas a la compra se extiendan a los vehículos de hasta un año e incluso a los modelos de "hasta cinco años para algunas rentas o para los afectados por las zonas de bajas emisiones". "Creemos que la descarbonización debe ser social y hay que acompañar a todos los españoles", refirió Blázquez, que también incide en que los incentivos no deben limitarse a los eléctricos.
Los concesionarios ven prioritario rejuvenecer un parque que alcanza ya los 15,4 años de antigüedad en la comunidad —por encima de los 14 de la media estatal y a distancia de los 13,9 de 2019— y en el que apenas un 0,4% de los turismos tiene etiqueta Cero (eléctricos e híbridos enchufables) y otro 2,3% tiene la Eco al ser híbridos.
Faconauto tiene claro que Galicia tardará todavía un tiempo en recuperar los niveles precovid, esto es, los 40.425 coches nuevos vendidos en 2019. Este año, la previsión es dar salida a 25.000, un 10% más que en 2022.
¿Qué coches demandan los gallegos?
Según el CEO de Ideauto, Bruno Brito, los SUV son los más deseados "en todas sus dimensiones" y, en cuanto a motorizaciones, el peso de los eléctricos es "inferior a la media nacional". Influyen los precios, la insuficiente infraestructura de recarga y que persisten cierto "miedo" y desconocimiento ante esta tecnología.
Las ayudas a la compra de eléctricos, prorrogadas
Para espolear la demanda de los modelos electrificados, el sector tiene claro que las subvenciones son la clave. Precisamente, este martes el Gobierno confirmó que el programa de incentivos Moves III, que iba a expirar a fin de año, se prorroga hasta el 31 de julio. La razón es que del presupuesto de 1.200 millones siguen quedando 290 millones disponibles. Los fondos los gestionan las autonomías y se focalizan en el vehículo eléctrico y en la instalación de puntos de recarga. A mayores, los compradores tienen acceso a una deducción fiscal de hasta un máximo del 15% en el IRPF.
