Se abre la veda para suplir a Ryanair: concurren Vueling, Wizz Air y Volotea

El futuro aeroportuario de Galicia depende en buena medida de si otras low cost logran cubrir el medio millón de asientos que recorta la irlandesa
Aviones de Ryanair. AEP
Aviones de Ryanair. AEP

La espantada de Ryanair da paso a un impasse clave en el futuro aeroportuario de Galicia: los próximos meses serán cruciales para saber si las terminales de la comunidad logran recuperarse de la estocada de la low cost irlandesa a costa de atraer vuelos de otras compañías o si, por el contrario —y este sería el peor de los escenarios posibles—, las rutas perdidas no consiguen reponerse o solo lo hacen en parte, lo que agrandaría la brecha con Oporto hasta niveles ya irrecuperables.

Por lo pronto, las españolas Vueling y Volotea y la húngara Wizz Air ya han presentado sus candidaturas para el 'concurso' a suceder a Ryanair en Galicia. Todas son compañías low cost, como es lógico por otra parte al tratarse de trayectos nacionales o vuelos europeos de corta duración.

Vueling es, por el momento, la única que ha pasado a la acción con el anuncio de un nuevo avión con base en Santiago y una ampliación de 76.700 asientos adicionales en Lavacolla. Son, eso sí, solo una sexta parte de los que se esfuman con el abandono de la base de Ryanair en la capital gallega, donde recorta 453.000 plazas —el mayor tijeretazo de toda España—, que se suman a las 31.000 de Vigo para dejar un desolador cómputo de 484.000 asientos menos en la comunidad. El de Vueling es, por el momento, el único movimiento tangible en aras de suplir a Ryanair, pero Galicia espera que no sea el único y que en las próximas semanas se reproduzcan anuncios como el de la low cost catalana.

Otra aerolínea que planea aterrizar en la comunidad, y cuya postulación quizás sea la más sorpresiva, es Wizz Air. Esta misma semana uno de sus directivos anunciaba que "puede ser" que la aerolínea "entre en Galicia", en el marco de un ambicioso plan de expansión de la low cost húngara en España, anuncios en prime time televisivo inclusive. Con la media de edad de la flota más baja de Europa —sus aviones no llegan a los seis años de media— y un compromiso con la aeronáutica europea —trabaja en exclusiva con Airbus, al contrario que Ryanair, que solo tiene Boeing estadounidenses—, Wizz Air es hoy por hoy una de las low cost más pujantes de Europa. Y si sus estudios para desembarcar en Galicia fructifican, sus llamativos aviones rotulados en rosa y azul podrían comenzar a verse en unos meses por estas latitudes.

El tridente lo completa Volotea, también catalana y de hecho 'hermana' de Vueling, ya que fue alumbrada por los mismos fundadores, aunque se 'fugó' a Asturias tras el referéndum de independencia de Cataluña del 1 de octubre de 2017. Muchos gallegos ya conocen esta low cost por haber volado con ella, sobre todo a las islas Baleares en temporada estival. Actualmente opera en A Coruña, cuyo aeropuerto es el menos afectado en esta crisis por la sencilla razón de que Ryanair no operaba allí. Desde Volotea informaron recientemente de que estudian entrar en Lavacolla.

¿Hay negociaciones entre concellos y aerolíneas?

Entretanto, no se descarta que desde los concellos de Santiago, A Coruña y Vigo estén moviendo ficha con las aerolíneas, en el contexto de unas negociaciones que rara vez se hacen públicas hasta que cristalizan en acuerdos.

Y en este sentido, es inevitable que salga a la palestra uno de los asuntos más controvertidos en materia aeroportuaria: las subvenciones, que han alimentado no pocos debates localistas en el pasado, con acusaciones cruzadas entre las tres ciudades aeroportuarias. Lo ideal, no obstante, es que las aerolíneas apuesten por Galicia en base a la demanda, más allá de incentivos económicos.