La Audiencia Provincial de A Coruña ha iniciado este miércoles la ejecución de la sentencia sobre responsabilidad civil del hundimiento del petrolero Prestige en 2002, que dejó una marea negra que afectó a las costas españolas, portuguesas y francesas, tras un auto de aclaración por parte del Tribunal Supremo.
En un comunicado, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) precisa que la Audiencia de A Coruña ya ha notificado la decisión al capitán del buque, el capitán griego Apostolos Mangouras, y al Fondo de Indemnización de la obligación de abonar las cuantías requeridas.
El capitán del buque ha sido requerido a pagar voluntariamente por su responsabilidad civil y un 30% adicional del cálculo prudencial de intereses y costas judiciales. "Ante la previsible insuficiencia de bienes del responsable principal, el tribunal ha realizado el mismo requerimiento a la propietaria del barco Mare Shipping, como responsable civil subsidiaria", indica el TSXG.
El fallo también ha sido notificado a la aseguradora The London Owners Mutual Insurance Association para que pague "hasta el límite de la póliza suscrita" en un plazo de veinte días, el mismo exigido al capitán y, subsidiariamente, a la naviera.
Por último, el Fondo de Indemnización de Daños Debidos a Contaminación por Hidrocarburos deberá abonar en ese mismo plazo la cantidad correspondiente a los límites establecidos en el convenio que lo regula, descontadas las sumas ya pagadas, según la notificación judicial.
Contra la resolución de la Audiencia de A Coruña cabe interponer un recurso de súplica, que tendría que ser presentado en un plazo de tres días.
Diez años después comenzó el juicio en la Audiencia de A Coruña, que condenó únicamente al capitán Mangouras a nueve meses de prisión por un delito de desobediencia grave a la autoridad, tras lo que se presentaron una docena de recursos ante el Tribunal Supremo, que corrigió la sentencia y lo condenó a dos años de cárcel por un delito imprudente contra el medioambiente.
El capitán, la operadora del barco y la aseguradora, Universe Maritime y London P&I Club, fueron así condenados al pago de la responsabilidad civil.