Consternación en la Praza de Abastos de Santiago: "Antonio era una excelente persona"

La consternación es palpable en Santiago incluso antes de entrar en la Praza de Abastos. Las décadas que Antonio Costa estuvo al frente de los puestos de Chelo & Muñico han dejado una profunda huella en la ciudad y, sobre todo, en sus compañeros de mercado, que este martes llenaron el recinto de crespones negros en señal de dolor por el violento suceso que se cobró su vida poco antes de las cinco de la madrugada. Pero, además, reclaman un refuerzo de la seguridad para defender unos negocios que consideran demasiado expuestos. 

"Antonio era una excelente persona, muy campechano, colaborador...", relata Yoli Castellanos, que lleva nueve años despachando quesos justo enfrente del negocio de Costa, en la nave número dos. La conmoción por el suceso, que deja ya dos detenidos, era palpable entre los placeros y los clientes de confianza, que conversaban para encontrar una explicación a lo inexplicable mientras recordaban a un carnicero cuyos productos, entre ellos sus célebres hamburguesas, trascendieron incluso el reconocimiento local: por su puesto se han dejado caer estrellas de los fogones como Karlos Arguiñano, Elena Arzak, Gordon Ramsey o José Andrés. 

Nada que hiciera que este hombre de 59 años que comenzó ayudando a criar ganado en la granja familiar de San Lázaro y que se incorporó en 1999 a una Praza de Abastos donde ya era conocida la caseta que tenía su madre, Consuelo, perdiera la cercanía hacia sus clientes y sus compañeros. "Era muy buen compañero de toda la vida", confirma Lourdes, que atiende otra carnicería en la nave paralela a la suya. "Cuando mi marido estuvo malo, siempre venía y me decía 'Lourdes, si te hace falta algo me avisas'", pone como ejemplo. 

"Estamos conmocionados", añade la mujer a cargo de la consigna de la entrada desde hace 17 años. "Era muy buena persona". Por ese carácter, precisamente, no logran encontrar respuesta a lo sucedido. "Me extraña que tenga problemas con alguien; no he visto ni la primera vez una persona que discutiera con él", informa Yoli Castaño, aún con el impacto de lo vivido de madrugada, justo al llegar a la plaza, cuando la Policía todavíaestaba dando los primeros pasos de la investigación en la misma escena del crimen, en la entrada situada al lado de la iglesia de San Fiz de Solovio. "La gente habla mucho pero aquí nosotros no sabemos nada", recalca Lourdes para atajar especulaciones.

Costa, informa Castaño, era siempre de los primeros en abrir las puertas. "Desde la mañana muy temprano estaba preparando su expositor, que lo ponía chulísimo; limpiando los cristales para que estuvieran impecables cuando no estaba atendiendo a la gente o colocando todo muy bonito", cuenta, mirando el ramo de flores que ahora, colocado sobre uno de sus mostradores, sirve como muestra de respeto hacia su memoria. Desde 2012, manejaba las ocho casetas de Chelo & Muñico junto a su hija Gloria.

Aunque desliza que "en algún momento" en los últimos años sí se había producido "algún jaleo" puntual delante de sus puestos, Castaño insiste en que la cuestión de la seguridad atañe a toda la plaza. "No es posible que nadie se entere de si yo entro o salgo cuando traigo las mercancías", explica, antes de subrayar, junto a otra placera a su lado, que un vigilante de seguridad no es suficiente "para todo lo que hay aquí, además a esa hora que viene Mercagalicia, los del matadero, los compañeros entran...". Lourdes coincide: "Tenemos muchos robos", afirma. "Para que no nos pasemos de la hora sí que vigilan, pero para lo demás..." desliza, crítica hacia las autoridades locales.

El vigilante, de hecho, estaba junto a Costa en el instante en que lo agredieron con un objeto contundente, y aunque trató de mediar, los tres presuntos implicados en el caso se deshicieron de él a empujones, según comentan desde la plaza. Acabaron evacuándolo al Hospital Clínico debido a una crisis de nervios. Horas más tarde, el trágico suceso copaba todas las conversaciones de vecinos y comerciantes, de los habituales del lugar y del entorno del mercado. Tan solo los turistas y peregrinos parecen al margen de lo sucedido, sorprendidos por el ambiente luctuoso y el despliegue mediático en los alrededores.

"Queremos enviar as nosas máis sinceras condolencias e apoio á familia e amigos. Hoxe o Mercado está de loito. Unímonos no recordo de quen nos acompañou tanto tempo co compromiso de seguirmos sendo unha comunidade unida. Descansa en paz, compañeiro", escribieron los responsables de la Praza de Abastos en las redes sociales.

"Vai haber detencións"

Hacia las doce, una representación de la corporación municipal encabezó el minuto de silencio en el corazón de la Praza de Abastos en memoria de Antonio Costa. A ellos se fueron uniendo varios placeros, con la emoción en el rostro. Al final, rompieron en aplausos.

"Polo que me transmiten, penso que o tema está encamiñado e que nas próximas horas si que vai haber detencións e a posibilidade de saber exactamente que aconteceu ", apuntó, en declaraciones a los medios, la alcaldesa de Compostela, Goretti Sanmartín. Los resultados de la autopsia y el avance de las pesquisas policiales "están polo bo camiño", dijo. Los arrestados son tres.

Según las primeras pesquisas, Antonio Costa fue asaltado por tres personas cuando llegó al mercado de madrugada. Tras un forcejeo, fue golpeado con un palo y cayó al suelo, por lo que la prueba forense confirmará si murió por la agresión o al golpearse en la cabeza en la caída. La opción de que se tratase de un robo parece descartada, toda vez que no se llevaron el dinero que tenía encima.

Con todo, "en contacto directo coa comisaria, co delegado do Goberno e con todo os corpos e forzas de seguridade ", la regidora quiso ser prudente acerca de las hipótesis que manejan los responsables de un caso bajo secreto de sumario y con la investigación en curso. 

"Nestes momentos o que nos corresponde como conxunto da corporación e goberno de Santiago é estar á beira non só da familia senón tamén de todos os placeiros na súa dor por un accidente que ao final acaba custándolle a vida a unha persoa moi querida en Santiago despois dun altercado ", zanjó para transmitir "todo o ánimo" a los allegados de Costa.