Cruz Roja y Xunta activan el teléfono gratis de atención ante la soledad no deseada

El teléfono de atención ante la soledad: una de las medidas de la estrategia gallega frente a esta lacra, que incluye un plan piloto para dar seguimiento a mil mayores de 65 años
Rueda, con unas gafas que simulan los achaques de la edad. (D.C.)
Rueda, con unas gafas que simulan los achaques de la edad. (D.C.)

En una comunidad en la que las estadísticas indican que unos 170.000 mayores de 65 años viven "en risco" o directamente en una situación de soledad no deseada, la Cruz Roja pone en marcha una central multicanal que contará con tres patas.

El primer eje es un número de teléfono gratuito (900 830 831), disponible de lunes a viernes de 10.00 a 18.00 horas para los ciudadanos que deseen conversar con una voz amiga.

Aquellas llamadas que se cursen fuera de este horario serán registradas en un contestador y serán devueltas en el siguiente día en el que el servicio esté operativo.

El segundo eje es un proyecto piloto con un millar de mayores de 65 años que recibirán seguimiento y acompañamiento personalizado para que no se sientan solos, en tanto que el tercer puntal será la creación de puntos presenciales de atención en las oficinas de la Cruz Roja por toda Galicia.

Acompañado por la conselleira de Política Social, Fabiola García, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, participó ayer en A Coruña en la presentación de la nueva central de atención a la soledad no deseada, una medida que se incluye en la estrategia que el Gobierno gallego impulsa para mitigar este fenómeno social "emerxente e crecente".

La iniciativa cuenta con un presupuesto de 600.000 euros. El mandatario explicó que el objetivo es "chegar a todas esas persoas, 170.000 en Galicia", de las cuales, constató, muchas son mujeres que "queren compañía, calor humano, que queren relacionarse".

"Un dos males silenciosos do noso tempo"

El primer paso para poner remedio al que definió como "un dos males silenciosos do noso tempo" es "detectar" estos cuadros.

La intención es que el teléfono sirva a sus usuarios para "contar a súa situación" con el fin de que se les pueda prestar ayuda y, al mismo tiempo, elaborar un censo para dispensarles un seguimiento.

Bajo el paraguas de la estrategia autonómica, dotada de 145 millones de euros, el Gobierno gallego también aspira a "tecer unha rede de solidariedade" con el apoyo de farmacéuticos y comerciantes.

Mercedes Casanova, presidenta de la oenegé en Galicia, llamó a los ciudadanos a "incluirse neste proxecto". "Entre todos, debemos ser os construtores dun entorno que sexa máis amable e humano para as persoas maiores", dijo.

Comentarios