Las cifras son bestiales. Los 250 millones de euros perdidos por los narcos gallegos en 2017 (más del triple del presupuesto anual del Concello de Pontevedra) son para ellos unas pérdidas razonables. El cálculo, efectuado a partir del porcentaje que les habría correspondido de las 25 toneladas incautadas por las fuerzas de seguridad en ese tiempo, sirve para fijar lo que dejaron de ingresar, pero para nada desvela la caja que consiguieron hacer a través de las operaciones que superaron el control policial. Supone, eso sí, una muestra clara del poder de las grandes organizaciones gallegas dedicadas al tráfico de cocaína, cuyos patrimonios, aunque mal repartidos (en manos de unos pocos) alcanzan cotas difíciles de imaginar.
Para efectuar una aproximación lo más real posible al patrimonio de los narcotraficantes de las Rías Baixas debemos tomar como punto de partida el valor de los bienes que, en uno u otro momento, se les han ido incautando. Así, el mayor botín que irá a parar (juicios mediante) a las arcas públicas procederá de Sito Miñanco y sus testaferros. Más de 200 inmuebles, si se suman los que fueron cuantificados en el proceso por blanqueo (cuyo juicio se retomará en próximas fechas en Pontevedra) y los que han sido intervenidos en la reciente operación Mito, constituyen un inmenso patrimonio valorado en más de 50 millones de euros. A ello hay que añadir los activos en forma de sociedades, muchas de ellas ocultas a Hacienda, y el dinero invertido en el extranjero. En total, los expertos cifran en más de 100 millones la fortuna del narco más famoso de todos los tiempos.

Sin embargo, los mayores poderes económicos se hallan en la sombra. Por encima de Miñanco, según fuentes policiales, se encontrarían al menos dos presuntos narcotraficantes jamás condenados por ello hasta el momento. El más conocido de ellos sería Óscar Rial, ‘El Pastelero’, cuyo patrimonio es "incalculable" según voces autorizadas.
Los siguientes en el escalafón serían los descendientes de Manuel Abal Feijóo, Patoco (fallecido en un accidente de tráfico en 2009), cuyos bienes alcanzarían los 40 millones de euros. Muchos de ellos les fueron decomisados tras la Operación Houddini, el mayor golpe al blanqueo de capitales en Galicia junto a la famosa Cormorán.

Precisamente la red desarticulada en esta última investigación (relacionada con el desaparecido Pelopincho) supuso el decomiso de 70 propiedades. Sin embargo, los largos años que han pasado desde la sentencia hasta su subasta están convirtiendo en misión casi imposible su venta, pues se encuentran, en general, muy deterioradas por la falta de mantenimiento.
Los Charlines son el clan que, si se suman las fortunas de todos sus miembros, podrían acumular más bienes, entre inmuebles y sociedades. Muchas de sus empresas, sin embargo, son en la actualidad perfectamente legales. La Agencia Tributaria no pudo determinar en su momento la procedencia de los fondos con los que fueron creadas, por lo que se han establecido en los canales lícitos. En todo caso, 58 de sus inmuebles están pendientes de lo que decida la Audiencia Nacional, que coordinó en su día la aún pendiente de juicio Operación Repesca.

La lista de narcos gallegos con mayores fortunas la completan Marcial Dorado, O Mulo, David Pérez Lago, Roberto Leiro Santos, Ramiro Vázquez Roma y los descendientes del fallecido Juan Carlos González ‘Culebra’. En todos los casos han sido objeto de importantes decomisos. Sin embargo, la Justicia sospecha que sus patrimonios serían aún mayores.
La Policía Nacional explica que "sin embargo, y pese a lo que pueda parecer, este negocio no crea riqueza. Genera una gran pobreza. Los grandes patrimonios están en manos de unos pocos y no los comparten, lo que hace que muchos de los que detenemos estén en la miseria, como comprobamos cuando hacemos los registros. Además, es dinero negro que no revierte más que en ellos mismos, ni en la sociedad ni en sus propios colaboradores".

Un elemento más que viene a confirmar el liderazgo de Pontevedra en materia de narcotráfico se extrae del informe sobre la actividad del Fondo de Bienes Decomisados por Tráfico de Drogas correspondiente al año 2017, publicó el Ministerio de Sanidad a través del Plan Nacional Sobre Drogas. Los datos, relativos a las subastas y las enajenaciones directas de bienes procedentes del citado negocio, sitúan a Pontevedra en primer lugar con mucha diferencia. Los inmuebles aprehendidos a narcos aportaron cerca de un millón de euros a las arcas públicas, casi un tercio de lo que se recaudó en toda España. Las provincias de Cádiz, Málaga o Las Palmas, por poner los ejemplos con mayor actividad en este tipo de delito, sumaron cantidades de entre 300 y 400.000 euros por este sistema.
El mismo informe desvela otras cifras que señalan el buen trabajo de la Policía Nacional, la Guardia Civil, el Servicio de Vigilancia Aduanera y la Agencia Tributaria a la hora de combatir el blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico. Así, según el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, en España se incautan cinco bienes procedentes del narcotráfico cada día, como media, de los cuales dos son vehículos y otros dos son inmuebles. El estudio es muy fiable, pues incluye datos que abarcan los últimos 21 años (1996-2017), y es una muestra más de las fortunas que se decomisan a estos individuos.

Más dificultoso es, en muchas ocasiones, darles salida a los bienes. Algunos casos, como los más mediáticos de los pazos de Baión o Vista Real (joyas de Oubiña y Los Charlines en su momento) o la mansión de A Laxe (propiedad del primero) encuentran compradores con facilidad. Sin embargo, otros inmuebles (como los citados de la red de testaferros de Pelopincho) se deprecian de tal manera que el Estado tiene que acabar vendiéndolos a precios de saldo.
Otra dificultad que por ahora es insalvable tiene que ver con las personas que adquieren los bienes. Nadie puede asegurar que no guarden relación con sus antiguos dueños, que, con mucho dinero negro en sus bolsillos, pueden pagar a hombres de paja para que recuperen sus mansiones.
Además, las decisiones judiciales de imponer "anotaciones preventivas" a los inmuebles hacen que puedan seguir disfrutando de ellos hasta que se dicte una sentencia firme. Un ejemplo de ello es el chalé de Miñanco en Montalvo, su presunto centro de operaciones en 2017 pese a estar intervenido desde hacía años.
Pese a sus constantes entradas en prisión, el narco más famoso de todos los tiempos mantiene, a día de hoy, una de las mayores fortunas, eso sí, a nombre de testaferros.
El cambadés, que ya saldó sus deudas con la Justicia, fue objeto del bloqueo de media docena de sociedades y 30 cuentas bancarias.
El viejo amigo de Alberto Núñez Feijóo cumple prisión por narcotráfico y blanqueo. La Sociedad Estatal de Gestión de Inmuebles someterá gran parte de su patrimonio a puja pública.
La familia vilanovesa está de nuevo en el ojo del huracán tras la operación de este verano.
Los inmuebles, obras de arte y sociedades que poseía antes de ser detenido elevarían su patrimonio por encima de los 50 millones.
A la espera de la confirmación del Supremo de sus dos últimas condenas, aún conserva buena parte de sus numerosos bienes a nombre de testaferros.
Todos los expertos le señalan como el dominador del negocio en el siglo XXI. Sin embargo, hasta el momento ha logrado salir airoso de múltiples investigaciones.
Tras aceptar la pérdida de un chalé en Aguete y otro en Las Rozas, su reciente implicación en la operación Mito pone en peligro varias empresas que, según los investigadores, maneja a través de testaferros.
El narco de Ribeira que muchos dan por muerto amasó una de las mayores fortunas a principios del siglo XXI. Sus inmuebles están deteriorados y tienen difícil salida.
Fue el discípulo aventajado de Sito entre 2001 y 2009, cuando falleció en un accidente. Los bienes están en manos de sus herederos.
La familia de Vázquez Roma tenía propiedades en Galicia, pero también intereses en Portugal que, en virtud de la sentencia del Supremo, logró conservar.
El hombre que le compró el barco a Marcial Dorado (hechos por los que ambos resultaron condenados), entregó parte de su patrimonio en 2016.