Un total de 210 incidencias fueron registradas entre las 18.00 horas del domingo y las 08.00 horas de este lunes en Galicia a causa de la meteorología adversa, que ha obligado a suspender las clases en 37 colegios de la montaña de Lugo y Ourense por las intensas nevadas y más de 2.200 alumnos no pudieron acudir a sus centros. La circulación en muchas carreteras de estas zonas es complicada también por el hielo.
La nieve, el hielo y el temporal causan problemas este lunes. Ssegún los datos facilitados por la Dirección General de Tráfico, continúa cerrada a la circulación la LU-P-1410 en Cervantes (Lugo), en la parroquia de San Martín, a causa de desprendimientos; y la OU-112 en Carballeda de Valdeorras (Ourense). Esta última vía se encuentra intransitable entre los kilómetros 16 al 26, en ambos sentidos, por intensas nevadas.
En Pazos de Borbén (Pontevedra), está activada la alerta roja en el kilómetro 10 de la PO-253 –en ambos sentidos– por la presencia de un obstáculo fijo a causa del temporal, que mantiene cerrado un carril. La misma alerta tienen los vehículos que circulen por la carretera LU-633 en O Cebreiro hasta Triacastela (Lugo), en el Alto do Poio, donde la carretera está condicionada en ambos sentidos por fuerte nevada. Es obligatorio el uso de cadenas o neumáticos de invierno y no tienen permitida la circulación autobuses, camiones o vehículos articulados.
CIRCULACION CONDICIONADA. En Ourense, la nieve también condiciona la circulación en la carretera OU-533 desde el kilómetro 1, en A Gudiña (Ourense), hasta el 40, en ambos sentidos de circulación; en la autovía A-52 entre las localidades ourensanas de A Mezquita y Riós; y en la OU-536 desde el alto de O Rodicio a Trives.
En la A-52 en Melón, un obstáculo fijo también afecta a la circulación en el carril derecho en dirección a O Porriño. Por su parte, en Lugo, las nevadas preocupan en la LU-651 a su paso por Folgoso do Courel, donde la circulación es irregular y está prohibido el paso a camiones y vehículos articulados. En la A-8, a su paso por Mondoñedo, es el fuerte viento el que mantiene el aviso de nivel amarillo y se requiere precaución.
Finalmente, en la provincia de Pontevedra, en Abelendo (Moaña) continúa cortado un carril de circulación en la carretera CG-4.1 por un desprendimiento, en dirección a Cangas; el mismo motivo por el que permanece también cerrado un carril en la A-52 a su paso por Salceda de Caselas, en O Outeiriño, en dirección a Ourense. La lluvia también mantiene cortado un carril en la N-550 a su paso por Redondela. Finalmente, aunque las carreteras de A Coruña son las menos afectadas por el temporal, un obstáculo fijo mantiene un corte en la AC-549 a su paso por Noia.
INCIDENCIAS. Hasta las 18.00 horas del domingo se habían registrados medio centenar de incidencias en Galicia y desde entonces hasta las 08.00 horas de este lunes fueron unas 200. La provincia de A Coruña fue, sin duda, la más afectada cun total de 111 incidencias, seguida de la de Pontevedra (44), Ourense (22) y por último Lugo con 19. La mayoría se debieron a la caída de árboles y ramas en las carreteras gallegas.
Por fortuna no hay que lamentar daños personales. En Culleredo los bomberos de Arteixo tuvieron que retirar las tejas que caían a la calle desde un edificio de cinco pisos situado en la Rúa Largo Caballero. Igualmente, hubo que cortar la circulación al tráfico en A Ponte Nova, en la AC-549 , en Noia, por el desprendimiento de chapas sueltas en la vía.
La nieve también se ha dejado sentir en el interior de la provincia de Pontevedra, en Rodeiro, donde el domingo se decretó el nivel amarillo en la carretera PO-533, a la altura de esta localidad de la comarca de O Deza. Está prohibida la circulación de camiones y vehículos articulados.
Y es que Galicia sigue con aviso naranja por intensas nevadas en Lugo y Ourense que dejarán más de 30 centímetros de espesor en zonas de montaña y alerta naranja en el litoral por mar combinada del oeste o noroeste con olas de 7 a 8 metros.
