El seguro de coche, una cobertura a medida e imprescindible

firma de un contrato

Al realizar la compra de un automóvil hay un factor muy importante que nunca hay que pasar por alto y ese es la contratación de una póliza de seguros que se caracterice por su calidad y su buen precio, consiguiendo el equilibrio perfecto

Por muy buen conductor que se sea, al salir a carretera, aunque sea para cubrir un trayecto de corto recorrido, se asume un riesgo y la inversión realizada en un seguro de coche es la que más tranquilidad puede aportar al automovilista.

Son muchas las precauciones que puede tomar el conductor, pero muchas otras son externas y pueden desembocar en un accidente importante que puede poner en riesgo incluso la vida de los pasajeros de los vehículos involucrados, como malas condiciones en el asfalto, lluvias o un fallo mecánico y contar con tu seguro de coche es crucial.

Al comprar un vehículo nuevo se ha de acertar también con el seguro que se contrate, ya que esto puede suponer un mayor gasto en un futuro.

Existe una amplia variedad de pólizas de seguro de coche y sus particularidades dependen también de la compañía aseguradora que se contrate para este servicio, por lo que es de vital importancia realizar previamente un estudio comparativo con las ventajas e inconvenientes que ofrece cada una de ellas.

Coberturas que no pueden faltar en un seguro de coche

A pesar de lo anterior, el contratante ha de asegurarse que su póliza cuente con las siguientes coberturas básicas.

Responsabilidad Civil

A la hora de poder circular contar con esta cobertura es de obligado cumplimiento por ley, esta cobertura es la esencial y básica con la que ha de contar un automóvil. La responsabilidad civil es una garantía que se encarga de cubrir cualquier daño que se produzca a terceros en caso de que se origine un accidente y en el que el asegurado, como conductor, haya sido el culpable o el responsable de tal siniestro o accidente de tráfico. En esta cobertura, la entidad aseguradora será la que responderá en todo momento en nombre del asegurado, haciéndose cargo tanto de los daños físicos, como de los materiales, que hayan podido sufrir aquellos terceros.

La asistencia en viaje

Se trata de una cobertura que incorporan la gran mayoría de seguros de coche y presta una doble función: de cara al automóvil, con asistencia desde el kilómetro 0 y remolque del mismo, y de cara a la persona, si sufre un accidente o una avería con la asistencia en viaje tendrá la tranquilidad de contar con una alternativa en medio de transporte para poder llegar al destino deseado.

Cobertura contra incendio

Esta es básica para aquellos casos en los que el coche pueda verse afectado por un incendio, ya que si no existe un tercero culpable que se haga cargo de los desperfectos sufridos, los costes correrán por cuenta del propietario y la aseguradora no tomará cartas en el asunto. Aunque este tipo de cobertura pueda incrementar el importe de la póliza, esta cantidad será ínfima y ahorrará al usuario más de un dolor de cabeza.

Cobertura contra robo

No son pocos los casos en los que el propietario de un vehículo se encuentra en este tipo de situaciones, ya no solo de que roben el coche en sí, sino que se lleven las ruedas, roben el equipo de música o derivado de ello, el auto sufra algún desperfecto externo o en su interior. Este tipo de cobertura es primordial y no supone un aumento en el precio de la póliza.

Cobertura de lunas

Esta también cuenta con un equilibrio perfecto entre calidad y precio por su bajo coste y gracias a la misma en caso de daños producidos en lunas y ventanillas o parabrisas, la compañía aseguradora con la que se tenga contratada la póliza de seguro se hará cargo de la indemnización correspondiente.