Con un plantel de cerca de 7.000 trabajadores y una producción media de 2.300 vehículos al día, la planta viguesa de Stellantis está más cerca de afianzar su futuro con la adjudicación de la plataforma Stla Small, que permitirá ensamblar la nueva generación de coches eléctricos pequeños y compactos con hasta 500 kilómetros de autonomía.
Carlos Tavares, el presidente de la multinacional, visitó este lunes la factoría de Balaídos, donde se reunió con el comité de empresa al que confirmó que las instalaciones "cumplen los objetivos de calidad y costes" que marca la matriz para ser una de las plantas a las que se adjudiquen nuevos modelos de vehículos.
En declaraciones a AGN, fuentes sindicales explicaron que el ejecutivo portugués dejó en manos del director de la planta, Ignacio Bueno, la confirmación final de la inversión —que rondará los 600 millones de euros— y que todo depende del reparto que realice el Gobierno central de los fondos europeos adjudicados a través de las próximas convocatorias del proyecto estratégico para la recuperación y la transformación económica (Perte) del vehículo eléctrico y conectado. En octubre, Stellantis obtuvo 6,7 millones para su taller de montaje y producción de baterías tras conseguir 15,2 millones un año antes para su proyecto Aries, enfocado a preparar la cadena industrial para producir la nueva generación de eléctricos a partir de 2026 y que cuenta con la participación de la planta madrileña de Villaverde y con una veintena de empresas y organismos de investigación.
La semana pasada, el ministro de Industria, Jordi Hereu, anunció para el primer trimestre la tercera convocatoria del Perte, que repartirá más de 1.200 millones.
LAS FURGONETAS. Por otra parte, CC.OO. aprovechó la cita con Tavares para interesarse por el relevo de la K9, las furgonetas de Peugeot, Citroën, Fiat y Opel. En este caso, el presidente tampoco confirmó ningún encargo, aunque sí señaló que Vigo está en una situación "idónea" para continuar produciendo la nueva generación de estos vehículos comerciales ligeros, una declaración en la que la central ve "una buena noticia".
La reunión con el ejecutivo —que duró poco más de media hora y contó con la asistencia de los directores de la región ‘Europa extendida’, Uwe Hochgeschurtz, y de fabricación, Arnaud Deboeuf, con los que Tavares recorrió la planta—, se produce después de que la dirección y el comité de empresa firmasen en noviembre el convenio colectivo para 2024- 2027, una hoja de ruta que recoge que la adjudicación de la plataforma Stla Small es clave para asegurar el futuro de la factoría, la más productiva de España con 404.585 vehículos ensamblados en 2022.
O
tro de los elementos que juegan en favor de las instalaciones es la modificación que el Ministerio para la Transición Ecológica ha operado en la planificación de la red de transporte de energía eléctrica para 2026. El documento, sometido a audiencia pública, incluye 72 millones para un nuevo tendido de alta tensión entre Pazos de Borbén y Balaídos y una subestación ampliada para cubrir la demanda de la factoría, pensando en su plan de electificación.
REUNIÓN CON RUEDA. En su visita a Galicia, el ejecutivo lisboeta se reunió con el presidente de la Xunta para analizar el futuro del fabricante de automóviles en Vigo y sus proyectos. Según informó el Gobierno gallego en un comunicado, el encuentro sirvió para "avaliar as oportunidades" que suponen los fondos Next Generation. El mandatario trasladó el apoyo de la Xunta a las empresas "que apostan por medrar e ampliar a súa produción" en Galicia.
