El Sergas avisa de que más de la mitad de los gallegos están pasados de peso y hacen poco ejercicio
En general pasados de peso y propensos al sedentarismo y a hacer menos deporte de lo recomendable. Este es el retrato robot de los gallegos que se traza a partir de los datos del Sistema de Información de Condutas de Risco (Sicri), con el que el Sergas trata de auscultar el estado de salud de la población de Galicia año a año.
Elaborado a partir de unas 8.000 encuestas, los resultados de 2024 de este análisis recogen que el 56% de los gallegos mayores de 15 años tienen kilos de más. Lo más habitual es que presenten sobrepeso –ocurre en el 38% de los casos, lo que equivaldría a unas 912.400 personas en la comunidad–, pero un 18% llega ya a la obesidad –alrededor de 432.200 habitantes–.
La prevalencia de este exceso de peso es, además, notablemente superior en los hombres (64%) que en las mujeres (49%) y va aumentando con la edad, hasta llegar a suponer el 68% de los casos en los gallegos en edad de jubilación.
En cambio, la población con peso bajo se concentra sobre todo en las jóvenes de 16 a 24 años (8%).
No se hace suficiente deporte
A grandes rasgos, se considera que hay cuatro factores principales que protegen frente al sobrepeso y la obesidad: una alimentación equilibrada, una actividad física regular, una buena higiene de sueño y el bienestar emocional.
Sobre la nutrición, más del 60% de la población refiere consumir a diario pan, cereales y fruta fresca, aunque solo uno de cada tres lo aplica a verduras y hortalizas. Casi el 90% cumple con la recomendación de consumir pescado, huevos o carne semanalmente, pero el estudio destaca que el 18,4% señale que nunca come legumbres o solo ocasionalmente.
Contrasta con el 24% que admite que algún dulce cae al día y el 68,7% que come embutidos y fiambres cada semana. Con todo, más del 70% respeta el consumo recomendado de refrescos, aperitivos o comida rápida.
En paralelo, seis de cada diez gallegos no hace suficiente deporte, es decir, que no llega a los entre 150 y 300 minutos semanales de actividad física moderada o entre 75 y 150 minutos si es vigorosa. En este apartado, flaquean más las gallegas (71%) que los gallegos (56%), aunque de nuevo, a cuantos más años, menos ejercicio.
Y eso que el 76% de los encuestados dice caminar de cuatro a siete días a la semana, con un tiempo medio de 66 minutos diarios. Pero, por término medio, cada gallego pasa cuatro horas y media sentado en una jornada corriente. Entre los jóvenes de 16 a 24 años es aún más: seis horas. Influye tener que estar en clase.
Salud mental en riesgo
En un apunte sobre el estado emocional y del sueño, el Sicri avisa de que uno de cada cuatro gallegos "está en risco de ter problemas de saúde mental", sobre todo las mujeres, que son un 32% frente al 19% de los hombres. Llama la atención que el máximo se alcanza en los menores de 25 años, con uno de cada tres en esta situación. También en este tramo se da la mayor diferencia por sexo, desfavorable para las féminas.
Luego, el 39% de los gallegos han tenido que tomar tranquilizantes, relajantes o pastillas alguna vez en su vida, la mitad de ellos en el último mes. De nuevo, es más frecuente en las mujeres, pero aquí afecta más a los mayores.
Dos de cada diez gallegos declaró que sufre o ha sufrido depresión, más las mujeres (28%) que los varones (12%). A partir de los 45 años, la prevalencia supera el 20%.
El impacto del exceso de peso
La Dirección Xeral de Saúde Pública recuerda en su Plan Obsesidade Zero que el sobrepeso y la obesidad, "estreitamente" relacionados "co aumento da inxesta calórica, a diminución do gasto enerxético, factores xenéticos, psicolóxicos e factores socioeconómicos, ambientais e culturais", significan un "factor de risco" de padecer enfermedades crónicas, como las patologías cardiovasculares, la hipertensión o la diabetes mellitus tipo 2.
También se los vincula al incremento de la incidencia de algunos tipos de cáncer, como los de próstata, endometrio, cérvix, mama, las vías biliares o los colorrectales.
Por otro lado, en términos económicos, citando un estudio de la OCDE presentado a finales de 2019, el departamento autonómico expone que el exceso de peso copa el 9,7% del gasto sanitario en España, lo que equivale a 265 euros de los impuestos de cada ciudadano y la pérdida de un 2,9% del PIB.