El riesgo que conlleva el exceso de ejercicio

Practicar algún tipo de deporte o de actividad física regularmente proporciona grandes beneficios al organismo. Esa forma de pasar el tiempo libre es cada vez más frecuente entre los españoles, que intentan aprovechar esos momentos para activar su cuerpo y su mente.

Sin embargo, los extremos no son positivos y evidentemente, el abuso en la práctica de deporte tampoco lo es. Diversos estudios arrojan el dato de que algunas personas acaban siendo adictas al deporte, y eso les puede ocasionar graves riesgos para su salud.

Los españoles y su gran afición por el deporte
En los últimos años ha aumentado de modo considerable el número de españoles que ven el deporte como una filosofía de vida. Cualquier ocasión es perfecta para su práctica: las vacaciones de verano o los fines de semana. Una gran mayoría lo realiza acompañado por la familia o por los amigos.

Además de practicarlo, los españoles disfrutan viendo partidos y competiciones en la televisión. También les gusta seguir a su equipo o deportista favorito a la vez que muestran su apoyo realizando apuestas en 888Sport, compartiendo esos momentos con sus allegados. Por todo esto, no es difícil entender la adicción que genera el deporte entre los españoles, ya que existen diversas maneras de disfrutarlo y de practicarlo. El problema llega cuando la persona se excede.

Las endorfinas, las grandes culpables de la adicción
Según los expertos, en la adicción al deporte intervienen factores físicos que estimulan al usuario a practicarlo. Después de la realización de un esfuerzo de esta índole, los deportistas sienten mucha euforia, debido a la liberación de endorfinas.

Los estudios demuestran que las endorfinas crean dependencia. La práctica de ejercicio hace que los niveles de estas hormonas disminuyan notablemente, por lo que el deportista tendrá la necesidad de aumentar la intensidad del ejercicio físico para conseguir que esos niveles se mantengan.

Los factores psicológicos también influyen
Muchos deportistas acaban sintiendo ansiedad cuando no realizan ejercicio físico. Su nivel de estrés aumenta y solo ven aliviada esa sensación si realizan deporte. De esta manera, la afición se acaba convirtiendo en una adicción, haciendo que el individuo deje de realizar otras actividades de su día a día para sustituirlas por la práctica de deporte.

Cuando se sobrepasa este límite, lo mejor es acudir a profesionales que proporcionen información al deportista sobre los posibles riesgos que conlleva su modo de vida. Una vez que este admita su problema, se buscarán soluciones usando medidas similares a las que se toman frente a otro tipo de adicciones.

No te arriesgues a padecer lesiones
Otro gran riesgo que supone la práctica de deporte de forma excesiva, es el elevado riesgo de sufrir lesiones. Es recomendable estirar y calentar siempre antes y después de cada ejercicio físico. De esta manera, se reduce esa posibilidad considerablemente.

Aun así, forzar el cuerpo más de lo recomendado, conlleva graves consecuencias. Lesiones musculares, rotura de huesos o ligamentos, e incluso desgarros de tendones, son algunos de los posibles riesgos a los que se expone el deportista. Aparte de no poder practicar deporte en una larga temporada también tendrá que hacer frente a soportar el dolor asociado a tales lesiones. Por tanto, lo más aconsejable es realizar actividades físicas, pero en su justa medida.