Alfonso Rueda lleva a Bruselas el frente regional para replantear los presupuestos de la UE
Alfonso Rueda puso voz este miércoles en Bruselas a la Declaración Galicia, el documento firmado en octubre en Santiago por la delegación española en el Comité Europeo de las Regiones –con 21 representantes de autonomías y entes locales– para expresar su rechazo a la propuesta de la Comisión Europea para el marco financiero 2028–2034 y, en particular, ante la creación de los llamados planes de colaboración nacional y regional.
En calidad de presidente del grupo español, y junto con eurodiputados del PP y del PSOE, apeló a una mayor cogobernanza de los fondos y a destinar más recursos al sector primario, ya que los "insuficientes" montantes propuestos para la Política Agraria Común (PAC) y la Política Pesquera Común (PPC), así como la desaparición del fondo específico para la pesca, "compromete a soberanía alimentaria" de la UE, avisó.
"O sector primario debe ser tomado moi en serio", subrayó el titular de la Xunta tras ofrecer la visión española en este encuentro organizado por el Comité Europeo de las Regiones de cara a la negociación que se irá desarrollando hasta 2027, cuando se espera el cierre definitivo de la propuesta. La razón es que, con el actual planteamiento de la Comisión Europea, se calcula que la dotación económica de la nueva PAC acarrearía un recorte de unos 80 millones anuales para el rural gallego –es decir, 480 millones menos para el sexenio– con los fondos para el desarrollo rural como principal damnificado.
A ello se suma el descenso del 67% de la partida comunitaria para la pesca y la supresión del Fondo Europeo Marítimo, de Pesca, y de Acuicultura (Fempa), integrado en un fondo genérico de cohesión.
Rueda insistió en que la postura de la delegación española, que "coincide" con la del Gobierno central, "non está de acordo en absoluto" con la "retirada" de fondos a la PAC para dedicarlos "a novos sectores e prioridades". Así, resolvió que "ten que seguir" el impulso "á modernización do campo, o relevo xeracional e a propia subministración dentro da UE" de alimentos producidos bajo sus "condicións" y "garantías".
En la misma línea, añadió que, pese al nuevo escenario estratégico, "hai prioridades que deben ser mantidas", como los fondos para la pesca y el Fempa, porque lo contrario "deixaría en moita peor posición" a Europa "respecto á soberanía alimentaria", ya que "habería que seguir comprando produtos" de países "onde non se aplican as normativas" europeas. Una competencia que para Galicia, "como primeira potencia pesqueira rexional da UE", sería "demoledora".
"Exemplo de unidade"
Rueda avanzó que, pese a que "hai moitas dificultades por diante", el camino iniciado ayer es el "adecuado", con el "exemplo de unidade por encima de partidos" plasmado en una representación autonómica en la que estuvieron los socialistas María Chivite y Emiliano García-Page o el popular Juanma Moreno, y eurodiputados españoles de PP y PSOE, que "teñen moita forza".
"A influencia do Parlamento europeo é moi grande á hora de ter capacidade de que avance na negociación; espero que se manteña esta unidade e que ao final as cousas fundamentais que defendemos teñan éxito".
Las autonomías exigen más cogobernanza de los fondos
La cogobernanza entre administraciones a la hora de planificar y gestionar los recursos procedentes de Bruselas fue otro de los pilares de la intervención de Alfonso Rueda. Un ámbito en el que la Declaración Galicia aboga por una verdadera gobernanza multinivel y por que no se reduzcan los fondos manejados de manera compartida entre UE, Estado y regiones.
La propuesta inicial de la Comisión Europea introduce los Planes de Colaboración Nacionales y Regionales, un nuevo modelo que integraría políticas como la cohesión, PAC, pesca o empleo bajo un mismo marco estratégico, lo que ha abierto un debate entre las regiones y los agentes socioeconómicos sobre la centralización en los Estados miembros frente a las prioridades territoriales específicas.
Así, la delegación española reclamó un presupuesto claro y diferenciado para cada región, así como poder trabajar con previsión con respecto a los fondos. "Non pode quedar a decisión de cada Estado o que vai repartir de fondos europeos entre as rexións e os concellos e ao mesmo tempo tamén no deseño das políticas nas que se van a empregar", argumentó Rueda para defender "a participación" actual entre los gobiernos central y autonómico.
"A política de cohesión ten que seguir sendo fundamental" para unas autonomías que "executan unha parte moi importante dos fondos europeos" y "con moita eficacia", reivindicó el mandatario gallego, que contrapuso los "moitísimos fallos e ineficacias" que demostró la ejecución centralizada del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia y los fondos Next Generation.
"O que se pretende agora neste novo marco financeiro" es "lanzar esa mensaxe de que non se cambie un modelo que estaba funcionando", resumió.
El futuro de la inteligencia artificial y las energías limpias
Alfonso Rueda intervino por la tarde en el 169 pleno del Comité Europeo de las Regiones para llamar la atención sobre el peso en el presente y el futuro de la inteligencia artificial y las energías limpias.
Por una parte, destacó el hecho de que Galicia ya cuenta con la primera ley autonómica en la materia, que garantiza un uso seguro y ético de la IA; o el hecho de que la comunidad albergará una factoría europea de IA, de las 19 proyectadas en Europa, lo que "la situará a la vanguardia y resultará un motor de innovación".
En cuanto al segundo asunto, el jefe de la Xunta reivindicó el "potencial extraordinario" de Galicia en renovables puesto que, actualmente, "más del 84%" de la generación eléctrica es limpia. Asimismo, comprometió la apuesta de su gobierno con proyectos estratégicos, regulándolos además con iniciativas como la Lei de Recursos Naturais, que asegura, dijo, que cada proyecto genere riqueza allí donde se implante, pues obliga a reservar el 50% de la nueva generación renovable para la industria local.
Con todo, reclamó también unas mejores redes de transporte de la energía.
