Comida árabe casera y natural,también para llevar

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La calle Libertad es una parte del casco viejo de Ourense poco recorrida por los nativos y aún  por descubrir para los visitantes pues, a pesar de su nombre, es una callejuela que en el mes de junio forma parte del corazón festivo de la ciudad pero durante el resto del año sólo recibe a sus moradores y haces de luz de la vecina plaza de San Marcial.

En esa calle, el argelino Abdelouab Merbah Chorfi encontró un edificio de cuatro plantas para vivir, con vecinos solidarios y generosos, según explicó a GG, que además le animaron a abrir en el bajo un restaurante con el objetivo de atraer paseantes a la parte medieval de la ciudad y a comensales ansiosos de sabores y aromas árabes, hasta ahora inexistentes en la ciudad de As Burgas.

Muchos incondicionales de la comida árabe y pocos restaurantes

Merbah es consciente de que en Galicia, como en el resto de España, muchas personas viajan a Marruecos de vacaciones y para descubrir una cultura diferente y normalmente ese es el momento en el que descubren la comida árabe pero a la vuelta a casa, no tienen lugares en los que desarrollar su nueva afición culinaria.

"En Francia fui jefe de cocina en un restaurante que ofrecía platos franceses y árabes y era uno de los muchos que había, pero en Galicia apenas hay algún restaurante de este tipo en A Coruña y poco más",explicó.

Ambiente árabe para comer "como dios manda"

El local alquilado por Merbah tiene espacio para una pequeña barra y once mesas rodeadas por una decoración que poco a poco, desde la apertura en el mes de mayo, incorpora elementos traídos por el propietario en múltiples viajes a su tierra natal.

Una pared del comedor ya está enmarcada por un pequeño arco de escayola que rodea la frase "como dios manda", en árabe, y representa para Abdelouahab el criterio que aplica en su oferta gastronómica: sólo comida natural, tradicional, con muchas verduras, carne y pescado de calidad, especiada y elaborada en un proceso "muy lento" en el que cada plato lleva unas 3 horas de preparación, según explicó.

Platos estrella y vegetarianos

El restaurador argelino elabora el cuscús como se hacía en su casa, con salsa blanca y poca verdura -no con tomate- y acompañado por pollo y ternera, por separado o juntos.

También prepara un tajine de pollo con puerros, de oferta frecuente en Francia, cuyo nombre corresponde tanto a la receta de carne con hortalizas y especias variadas como al recipiente  de barro con tapa cónica en el que se sirve.

El pescado tiene su lugar en esta cocina argelina con las albóndigas de sardina, tradicionales de la capital argelina.

A esta oferta veraniega se le suma el tradicional "borak" o "burek" argelino, elaborado con pasta brick, pollo, ternera y patatas, las "falafel" o croquetas esponjosas de garbanzos, las "kefta" o albóndigas de carne picada y hamburguesas caseras de ternera.

La oferta invernal se estrenará en pocas semanas e incluirá potaje árabe, sopa de pescado, sopa argelina de verduras o "chorba" y otras especialidades que Merbah elaborará pensando también en los comensales vegetarianos.

La comida puede encargarse e ir a buscarla al restaurante para su degustación en casa o en el propio local y se podrá acompañar con bebidas sin alcohol, diferentes tés al estilo argelino, y agua.

De sobremesa más té y dulces tradicionales

El té es la bebida tradicional árabe y acompaña tanto a un aperitivo como a un postre y ambos se unen en el local de Merbah, donde se podrá elegir entre postres argelinos como los de almendra y cacahuete decorados con una capa de azúcar de diferentes colores, italianos como el tiramisú o franceses como el mousse de chocolate o la tarta de crema chamuscada o "brûlé".

Comida árabe también durante el Ramadán


Abdelouahab pasó este año su primer Ramadán -período de ayuno- compaginado con los trabajos de la cocina pero consiguió no cerrar ningún día -salvo los lunes como siempre- aunque, según dijo, preparar las cenas encargadas le resultó especialmente duro pues coincidían en el momento en el que podía ingerir alimentos, según las prescripciones religiosas.

"En esos días tardé un poco más en preparar los encargos pero siempre se lo expliqué a los clientes y nunca hubo problema", agregó.

El Ramadán terminó hace una semana y el restaurante Arabika recupera ahora su ritmo normal,sólo durante unas semanas pues en pleno otoño será uno de los establecimientos que participe en el programa de "La Intercultural", semana de actividades que incluirá un mercadillo de artesanía de varios países y degustaciones de platos tradicionales.

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