El 27º debate sobre el estado de la autonomía se cerró el miércoles en el Parlamento gallego con mayor nivel de acuerdo del que se podría esperar atendiendo al abismo político exhibido el lunes en el hemiciclo y al marcado ambiente electoral de la cita, que en cierto modo supuso el pistoletazo de salida de una larguísima carrera hacia Monte Pío. Así, más que destacar las 41 propuestas de resolución aprobadas, sorprendió la capacidad de los tres grupos de sellar pactos unánimes en trece, las más relevantes relacionadas con la exigencia al Gobierno central del cumplimiento de la agenda gallega: infraestructuras, autogobierno, fondos europeos y financiación autonómica. Pero también recibió el aval total del hemiciclo la propuesta estrella de Alfonso Rueda: el bono de 5.000 euros para dependientes cuidados en casa y su complementeo de 1.200 para los que se atienden en residencias.
A esas propuestas sociales del PPdeG con respaldo unánime se suma una sobre la convocatoria de la comisión mixta para transferir competencias a Galicia, con prioridad para la AP-9 y la gestión del ingreso mínimo vital.
En cuanto a las infraestructuras, los 73 diputados presentes votaron sí a convertir Galicia en "nodo loxístico estratéxico do sur de Europa", con todo lo que implica para el corredor ferroviario, y también demandar una movilidad sostenible con muchas obras pendientes, propuesta del BNG transaccionada con una del PP para meter ahí la demanda de los trenes Avril al Estado.
Con el BNG también transaccionaron los populares la exigencia al Ejecutivo central para retomar la reforma del modelo de financiación, con el añadido nacionalista de caminar hacia el "autogoberno " económico de Galicia. Y en la misma línea acordaron reclamar celeridad con los fondos europeos de recuperación y, sobre todo, la cogobernanza Xunta-Estado.
Tampoco faltó el respaldo unánime, ya habitual, a exigir financiación para el modelo de dependencia, mientras que BNG y PSOE apoyaron también propuestas del PP para bajar el Iva a los productos del mar o dar ayudas a la producción de la carne. En la lista de unanimidad hubo demandas para divulgar el Camino en Europa o exigir juzgados de violencia de género en Ourense, Santiago, Lugo, Pontevedra y Ferrol.
Las trece propuestas aprobadas con el sí de PP, BNG y PSOE suponen cuatro más que las nueve del último debate, el de 2021 con Feijóo, donde buena parte de las alianzas también estaban orientadas a exigir al Gobierno central que cumpla con la deuda histórica de Galicia en infraestructuras. Pero dos años después, buena parte de aquellas demandas siguen sin cumplir, de ahí la necesidad de volver a ponerlas sobre el papel.
Gaza
En total, hubo 41 propuestas aprobadas, las 40 del PP que tenían garantizado su éxito con la mayoría absoluta del grupo y una del PSOE. Y no fue una cualquiera, sino una que tenía que ver con el conflicto de Gaza donde se pide al Estado que defienda que se mantengan la ayuda humanitaria a la población palestina siempre que esta no vaya a parar a financiar "ninguna" actividad "terrorista" dirigida hacia Israel.
Como incluyó modificiones del PP para condenar a Hamas, provocó una acción con pocos precedentes en la historia del Parlamento: el BNG no votó porque no se incluyó una mención hacia la "represión " de Israel sobre Palestina. "Non se pretendía o acordo, querían outra cousa", lamentó Luis Bará para justificar que el BNG no pulsara sus 18 botones —faltaba por baja Olalla Rodil—.
Sí salió adelante, y por unanimidad, la resolución del PP que condena de forma genérica el terrorismo "e calquer discurso" que "minimice" o "non condene" sus consecuencias.
Balance
El resultado de las negociaciones en términos numéricos deja un balance equitativo entre los acuerdos alcanzados por el grupo mayoritario y los de la oposición. Así, el PP alcanzó cuatro pactos transaccionales con el BNG y otros tantos con el PSdeG, así como uno con ambos —el paquete de infraestructuras—.
Aunque los grupos consiguieron llegar a acuerdos, tampoco maquillan que el PP tumbó con su mayoría 39 de las 40 propuestas del PSdeG —todas menos la de Gaza— y también mandó a la papelera otras 38 del BNG, que solo vio en éxito en dos una vez las transaccionó con el PPdeG.
En las votaciones de las propuestas del PP, el PSOE respaldó 18 iniciativas por las 9 que apoyó el BNG, mientras que los primeros votaron en contra de 10 y los segundos dijeron no a 14.
Debate
Antes de la votación que cerró el debate, fue el turno de los viceportavoces. Paula Prado (PPdeG) reivindicó a Alfonso Rueda como un presidente "á altura" de lo que Galicia necesita, al tiempo que reiteró sus exigencias al Gobierno central y a Pedro Sánchez.
"Rueda falou da Galicia que non para, da que avanza, da que os galegos están orgullosos", dijo Prado. "E traballa por un futuro seguro e próspero". Y contrapuso esa realidad a la actitud de la oposición. "Cando entrei no Parlamento en 2009 Pontón xa levaba unha lexislatura e entón xa falaba neses mesmos termos da Xunta". "As intervencións de BNG e PSdeG son practicamente as mesmas ano tras ano", concluyó.
Luis Bará (BNG) reprochó el rodillo del PP para tumbar todas sus propuestas, pero dejó claro que las pondrán en marcha cuando lleguen a la Xunta, que será "cuestión de tempo", porque "Rueda é un presidente accidental que está no seu epílogo".
Y la socialista Begoña Rodríguez Rumbo lamentó que Alfonso Rueda "non teña proxecto de país", frente a 40 propuestas socialistas que, a su juicio, sí mejorarían al vida de los gallegos. Al menos, dijo, más que el "discurso baleiro " del propio Alfonso Rueda, que duró en su primera intervención 84 minutos, de los cuales "corenta dedicounos a criticar o Goberno do Estado e a descualificar ao presidente Pedro Sánchez"
