Exteriores confirma que no hay españoles entre las 107 víctimas mortales del avión siniestrado en Cuba

La mayoría de los fallecidos son de nacionalidad cubana ► Las tres supervivientes permanecen en estado crítico

Restos del avión siniestrado en La Habana. OMARA GARCÍA (EFE)
photo_camera Restos del avión siniestrado en La Habana. OMARA GARCÍA (EFE)

El Ministerio de Exteriores ha confirmado este sábado que no hay españoles entre las víctimas del accidente de avión ocurrido este viernes en las inmediaciones del aeropuerto internacional José Martí de La Habana.

La aeronave se dirigía a la ciudad cubana de Holguín con 110 personas a bordo cuando se precipitó a tierra entre las localidades de Boyeros y Santiago de las Vegas, tras despegar desde el aeropuerto internacional de la capital de Cuba.

Tres mujeres han sobrevivido al impacto y, entre las 107 víctimas mortales hay cinco niños, uno de ellos un bebé menor de 2 años.

La mayoría de las víctimas son de nacionalidad cubana y hasta el momento se ha confirmado que dos eran argentinos, a los que se suman los seis tripulantes, que eran mexicanos, según los últimos datos oficiales.

El accidente del vuelo DMJ-972, que cubría la ruta nacional La Habana-Holguín, ocurrió a las 12.08 hora local (16.08 GMT), cuando la aeronave se precipitó sobre una zona de cultivos del municipio de Santiago de Las Vegas, a un kilómetro del aeropuerto José Martí de la capital cubana.

Las autoridades cubanas crearon de inmediato una comisión de investigación para aclarar las causas del siniestro, anunció el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, quien se trasladó al lugar del accidente poco después de la caída de la aeronave. "Se van a hacer todas las investigaciones" para esclarecer las causas del accidente, dijo el mandatario, quien envió condolencias a los familiares de las víctimas.

Por el momento no se conocen las circunstancias por las que el avión se estrelló, aunque varios testigos manifestaron que vieron cómo el aparato trató de maniobrar nada más despegar para evitar colisionar con unas casas. "El avión sale del aeropuerto y parece que no pudo levantar. Venía por aquí y parece que cuando él (el piloto) vio las casas, maniobró y cuando dobló se enredó con los cables eléctricos, y ahí fue cuando se desprendió y cayó", narró a Efe Yordelis Góngora, quien vio lo sucedido.

Según un informe preliminar de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de México, la compañía Global Air, propietaria de la aeronave, había superado hace seis meses la revisión técnica realizada cada año por la Dirección General de Aeronáutica Civil de México.

La aerolínea confirmó en un comunicado que en el avión viajaban 104 pasajeros y seis tripulantes: un comandante, un primer oficial, una sobrecargo mayor, dos sobrecargos primeras y un técnico de mantenimiento.

Global Air fue fundada en 1990 en la ciudad mexicana de Guadalajara y se dedica a proveer aviones a otras operadoras de vuelo, como el caso de la aeronave accidentada.

Tres mujeres sobrevivieron al accidente y fueron trasladadas al hospital Calixto García de La Habana, donde permanecen en estado crítico.

Los medios estatales cubanos concretaron que entre las tres heridas se encontraban dos mujeres caucásicas, una entre 18 y 25 años y la otra de 30 años. Una de ellas fue identificada como Emiley Sánchez de la O, residente en la provincia de Holguín, de 39 años, quien llegó al centro médico con fracturas, quemaduras en el 30 por ciento del cuerpo y traumatismo craneoencefálico.

Una de las mujeres podría estar embarazada, según se aprecia en una de las fotografías de las supervivientes publicadas por los medios oficiales cubanos, aunque las autoridades no han confirmado este extremo.

El de este sábado es unos de los accidentes más graves ocurridos en la aeronáutica civil en la historia de la isla, solo superado por el acaecido el 3 de septiembre de 1989 cuando un Ilyushin 62 con destino a Milán cayó en La Habana poco después de despegar. En ese siniestro murieron los 115 ocupantes del avión (dos cubanos y 113 turistas italianos), así como 40 personas en tierra debido a que el aparato se desplomó sobre una zona habitada.