Ourense será para comérselo, en la televisión

Juan Echanove y el hermano Pascual a las puertas del monasterio de Oseira
photo_camera Juan Echanove y el hermano Pascual a las puertas del monasterio de Oseira

La grabación del capítulo "Una de romanos en un bosque animado" comenzó en el mes de mayo con imágenes de la Romería Etnográfica "Raigame", que desde hace 9 años reúne en el burgo medieval de Vilanova dos Infantes (Celanova) a decenas de artesanos y muestras de oficios tradicionales de Galicia, coincidiendo con el Día das Letras Galegas.

Allí estuvo "Tonino", Antonio López Guitián para los amigos, con cámara y micrófono y ahora, en la primera semana de noviembre, están los también actores Imanol Arias y Juan Echanove para disfrutar-grabar de la receta del "pulpo á feira" y su origen en torno al monasterio de Oseira (San Cristovo de Cea), la elaobración del pan de Cea, y vinos de todas las denominaciones de origen de Galicia, de las que 4 están en la provincia de Ourense.

El hermano Pascual de Oseira, Carlos el panadero, el cineasta José Luis Cuerda, ellutier de gaitas Manuel y una criadora de "porco celta" serán protagonistas también del capítulo ourensano.

En una rueda de prensa explicaron la filosofía de su trabajo en la serrie documental de ficción "Un país para comérselo" , acompañados por los impulsores de su presencia en Ourense, el presidente de la Diputación de Ourense José Luis Baltar y por el gerente del Instituto Orensano de Desarrollo (Inorde) José Manuel Rodríguez.

Imanol Arias, ourensano de Ermua

El actor aludió a su vínculo con la provincia desde su infancia ya que pasó la mayor parte en Ermua (Vizcaia).

"Estuve hasta los 19 años en Ermua del País Vasco aunque podría decirse en Ermua de Ourense si hablo del origen del mayor número de habitantes", explicó.

Del capítulo sobre Ourense dijo que será especialmente "enxebre" pues tiene "la magia de las brumas y los bosques y el tiempo nos está acompañando en ese sentido" y añadió que la provincia tendría contenidos para siete capítulos más "pero es imposible".

Destacó de la experiencia vivida en la provincia, un plato de jarrete a la piedra "del que hay que gritar a voces que es jarrete pues al comerlo parecía que me habían engañado y era solomillo, de lo mantecoso y rico que estaba".

Juan Echanove "Sancho Panza"

Arias dijo que el programa "Una país para comérselo" tenía una premisa inicial que fue cambiando pero la idea era que Echanove hacía un viaje y "tal como hizo Sancho Panza con don Quijote" luego le invitaba a él a sumarse a sus descubrimientos, aunque "luego el viaje se tornó más compartido".

Echanove habló de la serie en la que son conductores "para que el espectador nos acompañe en este viaje con la misma intensidad y sentido del humor que nosotros transmitimos", explicó.

En relación a Galicia, se refirió al plato de "croca" de ternera (trozo de carne de la cadera) y a los vinos tostados del Ribeiro como algo para reivindicar e incluido en el guión por ese motivo, junto con otros elementos gastronómicos más conocidos como la castaña, el "marrón glacé" y todo ello acompañado con imágenes obtenidas desde un "paramotor" (parapente con motor) que sobrevoló parte de la provincia.

Más Galicia para comérsela


El primer capítulo dedicado a Galicia en "Una país para comérselo" (de los 26 que se grabarán) se grabó en las Rías Baixas y fue emitido hace un mes.

Echanove y Arias se refirieron a la gastronomía gallega con dos anécdotas. Una de ellas referida a la carne de vacuno que prepara Gregorio Tolosa en su restaurante navarro "Epeleta" de Lekumberri, y les llama cuando recibe un canal de 150 kilogramos.d

"Mi primo -en alusión a Echanove- y yo nos vamos allá cruzando 500 kilpometros o los que haga falta para probar ese manjar cada vez que le llega, y cuando comemos el chuletón y preguntamos a Gregorio qué tiene esa carne para llevarnos a nosotros desde 500 kilómetros, él nos contesta que es gallega", explicó Arias.

Por su parte, Echanove explicó que durante las grabaciones se pasan el día comiendo porque todo el mundo les da a probar sus recetas y recordó la experiencia reciente de una cena-desayuno, con café y bollería poco antes de acostarse en un restaurante en el que la propietaria les dijo: "No puden irse de aquí sin probar mis natillas".

"Y nos puso delante dos tazones de medio litro cada uno de natillas y estaba aquello de rico, para llevarselo en fiambrera a los del resto del equipo", agregó.

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