Las bajas de más de un año se triplican en un lustro en Galicia
Si hay una comunidad donde las bajas laborales largas aumentaron especialmente en los últimos años, esa es Galicia. Se lleva la palma al multiplicar prácticamente por tres en el último lustro el número de procesos de incapacidad temporal de larga duración, esto es, los que se extienden por más de doce meses. En 2018, los trabajadores que se encontraban en esta coyuntura eran de media 4,8 de cada mil, mientras que en 2023 esa ratio se disparó hasta los 12,5, con lo que Galicia se sitúa como segunda en un ránking que lidera Canarias, con 13,6 casos por cada millar de asalariados.
No solo eso, sino que Galicia también ocupa el segundo puesto en cuanto a la duración de las bajas, con 64,7 días de media, superada en este caso únicamente por Extremadura (70,3). Ninguna de las 17 comunidades y ciudades autónomas restantes rebasa los dos meses de media.
Y, de nuevo, preocupa la evolución de los últimos cinco años, en los que la baja promedio se expandió en Galicia de 58,9 días a 64,7, el mayor incremento de toda España. De hecho, en el resto del territorio nacional la tendencia fue decreciente, coincidiendo con un endurecimiento generalizado de las condiciones médicas a la hora de conceder bajas. Así, mientras que la duración media en el conjunto del país descendió un 3%, en Galicia creció un 10%, según un estudio sobre absentismo laboral realizado por Umivale Activa y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie) tomando datos de la Seguridad Social.
Con todo, el vértice más preocupante, comenzando por la propia salud del trabajador afectado y teniendo además en cuenta la organización interna de las empresas, es el de las bajas de larga duración, aquellas que se extienden por más de un año. Y en este apartado Galicia se encontraba en 2018 entre las comunidades con menos casos, con 4,8 por cada mil trabajadores. Una tasa que, cinco años más tarde, en 2023, se transformó en 12,5, casi el triple.
Fue la mayor alza en un conjunto estatal donde la tendencia fue también claramente creciente: la media nacional aumento de 5,2 bajas de larga duración por cada mil trabajadores en 2018 a las 9,3 del pasado 2023, casi el doble. Esto es producto de un incremento extensible a todas las comunidades. Solo la ciudad autónoma de Ceuta experimentó un ligero descenso de dos décimas —de 4,7 a 4,5—. En términos totales, al cierre de 2023 había en vigor 167.000 bajas de extensión superior al año —de las que aproximadamente 13.750 se localizaban en Galicia— frente a los 83.000 registrados en 2018.
Abriendo el foco a las bajas en general, y no solo a las de larga duración, en Galicia hay alrededor de 60.000 trabajadores que faltan cada día al trabajo a causa de una incapacidad temporal de los cerca de 1,1 millones que conforman su mercado laboral.
¿Por qué aumentaron tanto las bajas de larga duración?
Tras comprobar el preocupante incremento de procesos de incapacidad temporal cabe preguntarse los porqués. Y la respuesta está en buena medida en los crecientes problemas de salud mental entre la población, que según datos de la Seguridad Social aumentaron un 118% entre 2016 y 2023 a nivel nacional. Es decir, se duplicaron en siete años. La travesía por la pandemia, según diversos terapeutas, tuvo parte de culpa.
Y con el foco puesto en las bajas de más de un año, el estudio publicado ayer destaca que el 56,1% de esos procesos en vigor a finales de 2023 correspondía a diagnósticos de salud mental o por dolores anatómicos, como lumbalgias, cervicalgias o dorsalgias.
¿Qué soluciones hay?
A la vista de estos resultados, los autores del informe insisten en la "necesidad de plantear actuaciones para mejorar la salud de los trabajadores" y también en una "gestión eficiente de los procesos por parte de los servicios de salud". Y requieren especial atención a la evolución de los procesos de larga duración, ya que "sus incrementos tienen un impacto significativo sobre el total de las jornadas perdidas".
