La única iglesia ibérica de mármol es suya, querida señora Rodrigo Cota / Historias del Camino Hay pocas iglesias construidas en mármol en el sur de la Europa occidental. En toda la Península Ibérica existe una sola, lleva casi un milenio en…
Ribadeo, la patria distinta y mejor Rodrigo Cota / Historias del Camino Según cómo la quiera ver usted, Galiza empieza o termina en Ribadeo, y puede dimensionar esta afirmación como le plazca. Yo, si me lo permite, la…
El otro final del Camiño Rodrigo Cota / Historias del Camino El final del final del Camiño es Fisterra. Ya antes de la cristiandad era un lugar místico que albergaba un templo celta dedicado al dios Sol y…
A Lanzada sí lo tiene todo Rodrigo Cota / Historias del Camino Ya imagino que estará usted harta de que cada vez que aparece un destino xacobeo en esta sección digo que lo tiene todo. Nunca miento, aunque a…
La fuerza de Valença do Minho Rodrigo Cota / Historias del Camino Los mesetarios suelen traducir el nombre al idioma de Ortega Smith como Valencia del Miño. Nada que ver. Lo de Valença viene de "Valiente", o sea…
Porto, el puerto del Camiño Rodrigo Cota / Historias del Camino HABLAR de Porto y de Galiza es hablar de una misma cosa. La relación es tan estrecha que procede del principio de todo. Porto es el puerto que da…
Ribadiso da Baixo y la magia del Camiño Rodrigo Cota / Historias del Camino Cuentan muchos expertos peregrinos, de esos que han hecho todas las rutas posibles, que el albergue de Ribadiso da Baixo, municipio de Arzúa es el…
La salida desde Pontevedra Rodrigo Cota / Historias del Camino Pensará usted con razón que para qué hablar en Pontevedra de lo que encontrará un peregrino en Pontevedra, si aquí todos lo sabemos. Eso es verdad,…
El Pico Sacro y sus mil leyendas Rodrigo Cota / Historias del Camino Si hay algún lugar en Galiza que mezcle y remezcle las leyendas sobre el Apóstol, sobre sus supuestos periplos gallegos en vida y sobre su llegada…
La fuente de vino Rodrigo Cota / Historias del Camino Esta fuente no es milagrosa, o sí, depende de lo que cada uno entienda por un milagro. De la fuente del antiguo monasterio de Iratxe, en Navarra,…
Las leyendas de A Escravitude Rodrigo Cota / Historias del Camino Según la leyenda, un buen día de 1582, el párroco de Cruces, parroquia del municipio de Padrón, andaba por ahí de paseo cuando un árbol se rompió…
El secreto de Andrea y Roberto Rodrigo Cota / Historias del Camino PACO SE había enamorado para siempre de Andrea, una compañera de curso en el instituto. Tenían los dos 17 años y no contemplaban su primer mes de…
Las conchas de la vida Rodrigo Cota / Historias del Camino Julia no madruga mucho. Nunca se levanta antes de las nueve de la mañana. Desayuna con calma y luego sale un rato a atender a las gallinas y el…
Vida de Manfred Rodrigo Cota / Historias del Camino Todas las mañanas, temprano, Manfred montaba su pequeño club social a las puertas de su casa. Colocaba una mesa y sobre ella una caja con fruta,…
La concha tatuada Rodrigo Cota / Historias del Camino Cuando vio entrar a Avelino, María lo miró sorprendida. En su negocio nunca entraba gente tan mayor. Algún peregrino despistado preguntando la…
El Camiño del sufrimiento Rodrigo Cota / Historias del Camino La idea fue una locura desde su origen. En el transcurso de una cena, dos parejas propusieron hacer el Camiño en bici desde el sur de Portugal. Al…
La tostada milagrosa Rodrigo Cota / Historias del Camino JOSÉ MARÍA vio aquella tostada con la figura de la concha xacobea perfectamente dibujada y sintió una emoción indescriptible. Sin duda era una…
Ruth y João Rodrigo Cota / Historias del Camino El Hostal do Camiño era el más antiguo del Camiño Francés y seguramente de todos los demás. Había sido fundado hacia 1912, que Ruth supiera, porque…
La etapa perdida Rodrigo Cota / Historias del Camino Se habían perdido aunque todavía no lo sabían. Caminaban charlando, sin prestar mucha atención a lo que estaban haciendo. Habían programado un fin…
La llamada divina Rodrigo Cota / Historias del Camino - Yo estaba sentado en el sofá, viendo la tele, creo, o jugando a la consola, no lo sé con total seguridad. Y en eso, tía, que me viene así como un…
La cuchara Rodrigo Cota / Historias del Camino Muchos años atrás, cuando Ricardo vivía con sus padres en Suiza, quería ser de mayor arqueólogo. Le fascinaba la idea de descubrir tesoros ocultos…
Vida de Memphis Rodrigo Cota / Historias del Camino Memphis ya no está para soportar sobre su lomo el peso de un jinete. Tampoco puede correr, ni trotar. Su dueña, Roberta, lo ha jubilado. Cuando era…
Un café con hielo Rodrigo Cota / Historias del Camino Tatiana no se encontraba bien. Era una cuestión anímica que había empezado justo al cumplir los 30 años, unos meses antes. Se sentía mayor, sola,…
La caída en desgracia de Javier Rodrigo Cota / Historias del Camino Javier extendió un mantel sobre el césped y luego lo estiró para eliminar las arrugas. Sacó diez o doce latas de conservas y las repartió de manera…
Las vacaciones del padre Félix Rodrigo Cota / Historias del Camino Félix descansaba bajo una higuera mientras disfrutaba viendo a los peregrinos. No imaginaba que fueran a ser tantos. Disfrutaba de sus primeras…
Celso, su vida y su bici Rodrigo Cota / Historias del Camino CELSO llevaba seis etapas reflexionando sobre la vida en general y particularmente sobre la suya. Atravesaba momentos muy duros, con todo y llantos,…
El reloj de cuco Rodrigo Cota / Historias del Camino Roberto Padín no era hombre de muchas luces. A sus 48 años no había pegado palo al agua. Había vivido cómodamente del dinero de sus padres,…
Dos extraños Rodrigo Cota / Historias del Camino Miguel Ángel se aproximaba un día más a la meta de su largo Camiño. Caminaba desde Roncesvalles sin más compañía que los habituales encuentros…
Un buen abrazo Rodrigo Cota / Historias del Camino Sin nombre David bajó del tren como cada año: con la mochila a la espalda y listo desayunar algo y echar a caminar. Antes de la muerte de…
El dibujante del Camiño Rodrigo Cota / Historias del Camino Sentado sobre una roca, Andoni Anzuategi, arquitecto jubilado, dibujaba el paisaje a la acuarela. Cumplía así un sueño largamente acariciado:…